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El Maná de la Torá por Dr Ketriel Blad


VaYakhel 22-6

E hizo que se reuniera

Éxodo 37:17-29

Hizo además el candelabro de oro puro. Hizo el candelabro labrado a martillo, su base y su caña; sus copas, sus cálices y sus flores eran de una pieza con él…También hizo de oro puro sus siete lámparas con sus despabiladeras y sus platillos.

 (Éx. 37:17, 23 LBLA)

 

¿Por qué no había madera en el candelabro?  

El candelabro de siete brazos con sus siete lámparas fue hecho de oro puro. No había madera en ellos. En el servicio del tabernáculo celestial el candelabro simboliza el discernimiento de espíritus y las lámparas la profecía (ver 1 Cor. 12).

Esto nos enseña que la profecía que viene del Espíritu del Eterno es totalmente pura. No puede haber mezclas de madera en los vasos que van a traer la profecía al mundo. El que profetiza en nombre del Eterno cosas de su propio corazón que Él no ha dicho comete una infracción muy grave. Hay muchas profecías falsas en el mundo carismático. Cuidémonos de ellas.

En Jeremías 23:25, 28, 32 está escrito: “He oído lo que dicen los profetas que profetizan mentira en mi nombre, diciendo: "¡He tenido un sueño, he tenido un sueño!"… El profeta que tenga un sueño, que cuente su sueño, pero el que tenga mi palabra, que hable mi palabra con fidelidad. ¿Qué tiene que ver la paja con el grano?--declara el SEÑOR… He aquí, estoy contra los que profetizan sueños falsos--declara el SEÑOR-- y los cuentan y hacen errar a mi pueblo con sus mentiras y sus presunciones, cuando yo no los envié ni les di órdenes, ni son de provecho alguno para este pueblo--declara el SEÑOR.”

Que el Eterno nos dé discernimiento para saber cuándo una profecía viene del cielo y cuándo viene de los hombres,

          Ketriel