Mana diarioParasháDonaciónDoctrina Trinidad

 

El Maná de la Torá por Dr Ketriel Blad


Ki Tavó 50-3

Cuando vengas

Deuteronomio 26:16-19

El SEÑOR tu Dios te manda hoy que cumplas estos estatutos y ordenanzas. Cuidarás, pues, de cumplirlos con todo tu corazón y con toda tu alma. Has declarado hoy que el SEÑOR es tu Dios y que andarás en sus caminos y guardarás sus estatutos, sus mandamientos y sus ordenanzas, y que escucharás su voz. Y el SEÑOR ha declarado hoy que tú eres su pueblo, su exclusiva posesión, como El te prometió, y que debes guardar todos sus mandamientos; y que El te pondrá en alto sobre todas las naciones que ha hecho, para alabanza, renombre y honor; y serás un pueblo consagrado al SEÑOR tu Dios, como El ha dicho.

 (Deut. 26:16-19 LBLA)

¿Cuál es el resultado de cumplir los mandamientos de todo corazón?

Otra vez la Torá insiste en la importancia de cumplir los mandamientos del Eterno. Sin embargo, el Eterno no sólo quiere que su pueblo simplemente cumpla sus mandamientos sino que lo haga con todo el corazón y con todo el alma.

La expresión “con todo tu corazón y con toda tu alma” también aparece en Deuteronomio 6:5, donde está escrito: “Amarás al SEÑOR tu Dios con todo tu corazón, con toda tu alma y con toda tu fuerza.” En Deuteronomio 10:12b está escrito: “que sirvas al SEÑOR tu Dios con todo tu corazón y con toda tu alma” y en Deuteronomio 30:2b está escrito: “le obedezcas con todo tu corazón y con toda tu alma conforme a todo lo que yo te ordeno hoy” y en Deuteronomio 30:10 está escrito: “si te vuelves al SEÑOR tu Dios con todo tu corazón y con toda tu alma.” (LBLA)

Juntando todos estos versículos vemos que el Eterno no se complace con la mediocridad. Si no le amamos, servimos, obedecemos y nos volvemos a Él con todo nuestro corazón y con toda nuestra alma, no vamos a serle agradables, como está escrito en Revelación 3:15-16: “'Yo conozco tus obras, que ni eres frío ni caliente. ¡Ojalá fueras frío o caliente! 'Así, puesto que eres tibio, y no frío ni caliente, te vomitaré de mi boca.” (LBLA)

El texto de hoy muestra que cuando el pueblo del pacto se entrega completamente con todo el corazón y con todo el alma será tomado y guardado como un especial tesoro del Eterno. Además será elevado por encima de todas las naciones de la tierra. Será alabado, renombrado y honrado por todos los pueblos y también será consagrado al Eterno su Elokim. Los resultados de una entrega total de un pueblo entero son inmensamente poderosos no solamente en los cielos sino también en el mundo entero.

Si esto es verdad en el plano nacional, también lo es en el plano personal pero en escala menor. El que tiene un corazón ardiente para amar al Eterno, un alma obediente para poner en práctica todo lo que la Torá del Eterno manda y unos oídos afinados para escuchar lo que el Espíritu del Eterno dice será tomado y guardado como un especial tesoro por el Eterno. Además será elevado por encima de otras personas y también alabado, renombrado y honrado por muchos. Además será consagrado al Eterno de una manera especial.

¿Quieres ser amado, considerado, honrado y elevado por el Eterno aunque no lo seas por los hombres? Entonces guarda sus mandamientos con todo tu corazón y con toda tu alma.

Que el Eterno derrame de su Espíritu sobre nosotros para que nuestros corazones siempre estén ardiendo para él y obedientes al sus mandamientos.

Kol tuv,

Ketriel