¿Quién hirió a los egipcios?
La Torá dice que el Eterno iba a pasar por Egipto y herir a todos los primogénitos. La única manera de ser protegido de esa muerte fue a través de la sangre del cordero. La sangre del sacrificio del cordero liberaba a los primogénitos de la muerte. Los primogénitos representan todo el pueblo.
El simbolismo con la muerte del Mesías Yeshua es muy claro. Por medio de su sangre somos liberados de la muerte eterna. Todos los que aplican su sangre de manera espiritual por medio de la fe no sufrirán la muerte segunda sino tendrán parte en la resurrección y la vida eterna.
Ahora, la pregunta surge ¿quién hirió a los egipcios? ¿Fue el Eterno, satanás u otro ángel? En este versículo está escrito que el destructor iba a entrar en las casas para matar. ¿Quién es ese destructor? Otros textos nos darán la respuesta. En 1 Crónicas 21:15-16 está escrito: “Y envió Dios un ángel a Jerusalén para destruirla; pero cuando estaba a punto de destruirla, miró el SEÑOR y sintió pesar por la calamidad, y dijo al ángel destructor: Basta, detén ahora tu mano. Y el ángel del SEÑOR estaba junto a la era de Ornán jebuseo. Y alzando David sus ojos, vio al ángel del SEÑOR que estaba entre la tierra y el cielo, con una espada desenvainada en su mano, extendida sobre Jerusalén. Entonces David y los ancianos, vestidos de cilicio, cayeron sobre sus rostros.” (LBLA c.f. 2 Sam. 24:16) Este texto nos revela que hay un ángel llamado “ángel destructor” o el “ángel que destruye”, malaj hamashjit –מלאך המשחית – que también es denominado “ángel del Eterno” malaj HaShem. En el texto de Éxodo que estamos estudiando ahora es mencionado sólo como “el destructor” hamashjit –המשחית – pero deduzco que se trata del mismo.
¿Pero no dice el texto sagrado que el Eterno iba a herir a los egipcios? ¿Cómo es que luego dice que es su ángel?
Esto nos enseña tres cosas:
- El Eterno opera a través de sus emisarios, sus ángeles. Cuando un emisario opera es como si el que le ha enviado lo hiciera y su obra es contada como la obra del emisor. Fue el Eterno quien hirió a los egipcios, por medio de su ángel, llamado “el destructor” – HaMashjit.
- El ángel destructor no es satanás porque es llamado “el ángel del Eterno” – Malaj HaShem. Aunque satanás sea un ángel creado por el Eterno, nunca es llamado ángel del Eterno en las Escrituras. A pesar de que sea un ángel rebelde tendrá que seguir cumpliendo los propósitos del Eterno. Él no puede hacer nada sin el permiso del Todopoderoso (ver el libro de Job). No hay dos Dioses, uno bueno y uno malo, sólo hay uno, el Altísimo, que domina sobre todo.
- El “ángel del Eterno” no es el Mesías porque el Mesías no es un destructor sino un salvador, simbolizado por el cordero sacrificado y comido en Pesaj.
¡Bendito sea el Eterno por la sangre del cordero que liberó de la muerte en nuestra primera redención y también nos liberará de la muerte en nuestra segunda redención.
Kol tuv – todo lo bueno,
Ketriel