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El Maná de la Torá por Dr Ketriel Blad


BeJukotai 33-6

En mis estatutos

Levítico 27:22-28

Sin embargo, cualquier cosa dedicada que alguno separe para el SEÑOR de lo que posee, sea hombre o animal, o campos de su propiedad, no se venderá ni redimirá. Toda cosa dedicada es santísima al SEÑOR. 

(Lev. 27:28 LBLA)

¿Qué significa la palabra jérem?

Este versículo trata de una consagración especial llamada jérem –  חרם  – que no es el mismo tipo de consagración que se ha tratado en pasajes anteriores. El término jérem tiene varios significados diferentes y hay que entenderlo según el contexto. En Levítico 27:21 y 28 y Números 18:14 significa una cosa consagrada al Eterno; en Deuteronomio 7:26 significa abominación; en Deuteronomio 13:17 significa cosa prohibida; en Josué 6:17 y Malaquías 4:6 (3:24 heb) significa exterminio; en Esdras 10:8 significa excomunión o confiscación, y en Ezequiel 44:29 significa sacrificio.

Jérem es mucho más fuerte que una consagración. Cuando uno entrega algo al Eterno en calidad de jérem no podrá ser redimido, es decir no puede ser comprado de vuelta. La palabra viene de la raíz jaram חרם – que significa clausurar.

Querido discípulo del Mesías, revisa tus cosas para ver si hay algo que no es digo de un santo como tú. Discos, canciones, fotos, revistas, imágenes, objetos de recuerdo, fetiches, joyas etc. Revisa a ver si hay algo que no puede dar gloria al Eterno y dedícalo al anatema, tíralo a la basura y no se lo des a otro. Si es malo para ti también lo es para otros. Saca de tu casa todo objeto conectado a la idolatría o paganismo para que no te alcance la maldición, como está escrito en Deuteronomio 7:26: “Y no traerás cosa abominable a tu casa, pues serás anatema como ella; ciertamente la aborrecerás y la abominarás, pues es anatema.” (LBLA)

Bendiciones,

Ketriel