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BeMidbar 34-1 En el desierto de Números 1:1-19 El SEÑOR habló a Moisés en el desierto de Sinaí, en la tienda de reunión, el primer día del segundo mes, en el segundo año de su salida de la tierra de Egipto, diciendo: Haz un censo de toda la congregación de los hijos de Israel por sus familias, por sus casas paternas, según el número de nombres, todo varón, uno por uno de veinte años arriba, todos los que pueden salir a la guerra en Israel, tú y Aarón los contaréis por sus ejércitos. (Núm. 1:1-3 LBLA) ¿Hay alguna relación entre la libertad y la disciplina? Ya había pasado más de un año desde la salida. El pueblo había tenido grandes experiencias espirituales y físicas. Habían entrado en el pacto y recibido la Torá de fuego desde el cielo. Habían construido un tabernáculo y aprendido cómo hacer sacrificios. El próximo paso en la educación del pueblo era enseñarlos el orden y la disciplina. Todo el libro de Números habla de este tema. Esto nos muestra la importancia que tiene para el Eterno. Este texto empieza hablando de la salida de Egipto y luego sigue hablando de un censo para el ejército de Israel. Esto muestra que hay una relación entre la liberación de la esclavitud la disciplina de un ejército. La verdadera libertad no es que cada uno haga lo que le parezca y se vaya a dónde quiera. La verdadera libertad tiene que ver con orden. Donde no hay orden no hay libertad. La opresión que experimentaron en Egipto fue causada por una disciplina incorrecta. Pero la solución para ser libre de eso no es la anarquía sino una disciplina sana, dirigida por principios de respeto y orden divinos. Los varones del pueblo que podían sujetarse a la orden de un ejército fueron contados y así el pueblo fue preparado para avanzar en su desarrollo espiritual hasta llegar a la meta final, la tierra prometida con el santuario como centro de adoración. Amado discípulo del Mesías, mentalízate para una vida bien disciplinada y podrás crecer espiritualmente y llegar a la meta final para tu vida. Shavua tov, Ketriel |